A las 6:22 p.m. del martes 18 de julio el territorio salvadoreño presenció un fuerte sismo con una magnitud de 6.8 en la escala de Richter. Desde entonces, el Ministerio de Medio ambiente dio a conocer que El Salvador registra ya más de 100 réplicas.
Por lo tanto, El Salvador amaneció en este miércoles 19 de julio con una peculiar forma en el cielo, formado por las nubes. Este fenómeno se conoce como “nubes aborregadas”, estas aparentemente anuncian o auguran sismos, alarmando a las personas.
Sin embargo, muchos expertos dicen que dicha interpretación se aleja un tanto de la realidad. Ya que, se trata, de nubes llenas de agua líquida y por lo regular, no llegan a producir precipitaciones. Por tanto, observarlas de esa manera no significa la corteza terrestre de vaticinar algún tipo de sismos. Pero, sí, prevé, la pronta llegada de un frente frío.
Incluso, el ingeniero, Moisés Urbina, compartió un par de imágenes de cómo se veía el cielo a primeras horas. Alertando a sus seguidores.
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