Ernesto Interiano, nació el 1 de septiembre 1917 y falleció el 16 diciembre 1943. Él era considerado un hombre de la clase alta, pero con un corazón noble. Según los santanecos, él se convirtió en enemigo número uno de la dictadura de Maximiliano Hernández Martínez.
Video/TCS. Reportaje elaborado por Diana Barillas
Su vida llena de aventuras y sobre todo su muerte a manos de Hernández, lo convirtieron en una especie de Francisco Villa, un héroe por fuera de lo oficial que defendía a los pobres y a los desposeídos. Sin embargo, con sus aventuras desafiaba y molestaba al orden establecido.
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Para los santanecos, Interiano es un verdadero héroe y villano. Sus restos yacen junto a su hija Míriam en el Cementerio Santa Isabel de Santa Ana. Muchas personas cada año le rinden un homenaje en su tumba.
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¿Quién fue Maximiliano Hernández?
Maximiliano Hernández Martínez fue presidente de El Salvador desde 1931 hasta 1944, y durante ese tiempo gobernó a su país de un modo personalista, autoritario y bastante controversial.
En diciembre de 1931, habiendo ascendido a general, derrocó al presidente Arturo Araujo, de quien era vicepresidente, y estableció un régimen dictatorial que se prolongaría hasta 1944.
Durante su dictadura sofocó violentamente la revuelta campesina de Izalco, Sonsonate (se estima que la represión causó 24,000 víctimas mortales), persiguió a los opositores políticos, censuró la prensa y favoreció los intereses de la oligarquía terrateniente.
Su régimen simpatizó con el fascismo y el nazismo, pero, con el estallido de la Segunda Guerra Mundial, la presión de Estados Unidos forzó su adhesión al bando aliado.
En 1944, una insurrección popular lo obligó a dimitir y a exiliarse a Honduras, donde muchos años después moriría asesinado.
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