El telescopio Webb nos sorprende con imágenes de un nuevo fenómeno captado en la estratosfera inferior de Júpiter, una capa atmosférica que se encuentra unos 40 kilómetros por encima de las nubes.
Pero, ¿qué identificó el telescopio? Esta vez observó una corriente de chorro de alta velocidad que tiene un ancho de más de 4,800 kilómetros y se mueve a 515 km/h, lo cual representa el doble de la velocidad que alcanzan los vientos sostenidos de un huracán categoría 5 en la Tierra.
“Los investigadores que utilizan la #NIRCam de Webb han descubierto una corriente en chorro de alta velocidad sobre el ecuador de #Júpiter, sobre las principales cubiertas de nubes”.
La investigación estuvo a cargo de científicos de la Universidad del País Vasco, en Bilbao, España; quienes usaron alrededor de cuatro filtros diferentes para identificar los cambios en la atmosfera de Júpiter.
Los resultados de este estudio fueron posibles gracias a las altas capacidades del telescopio Webb, que permiten observar las interacciones dinámicas dentro de la atmosfera de Júpiter.
«Lo que siempre hemos visto como brumas borrosas en la atmósfera de Júpiter ahora aparecen como rasgos nítidos que podemos rastrear junto con la rápida rotación del planeta», expresó en un comunicado Ricardo Hueso, autor principal de la investigación.
Las peculiaridades de Júpiter
Júpiter es el planeta más grande del sistema solar y está compuesto mayormente por gases, debido a ello se cree que no podría ser tan diferente a la Tierra. Al igual que nuestro planeta, Júpiter está compuesto por una atmosfera de capas, las cuales ya han sido observadas por distintas misiones con tal de entender las interacciones que ocurren entre ellas.
Además, las capas de Júpiter contienen una serie de patrones climáticos, que incluyen tormentas que duran siglos. Una de ellas es la Gran Mancha Roja de Júpiter, y nubes formadas por amoniaco helado.
Te podría interesar: La NASA retrasa su primer vuelo tripulado hacia la Estación Espacial Internacional
