Las lluvias continúan azotando algunas zonas de Filipinas, lo que llevó a un deslave cerca de un pueblo minero de ese país. Hasta este domingo, la cifra de fallecidos incrementó a 54 personas. Así lo han reportado las autoridades locales.
A través de la cuenta X, la Administración de Servicios Atmosféricos, Geofísicos y Astronómicos de Filipinas (PAGASA-DOST) escribió sobre los últimos pronósticos de lluvias o tormentas:
«Información sobre tormentas eléctricas NCR_PRSD Fecha de publicación: 11 de febrero de 2024 a las 22:00 horas Es MENOS PROBABLE que la tormenta eléctrica se desarrolle sobre el área metropolitana de Manila (Metro Manila, Bulacan, Rizal, Laguna y Cavite) dentro de las 12 horas. Se recomienda a todos que continúen monitoreando las actualizaciones.»
En el pueblo de Masara, según la cuenta oficial, se recuperaron 19 cuerpos de entre los escombros, en la isla meridional de Mindanao, la segunda más grande de Filipinas. De igual manera, hasta este momento, son 63 personas las que se encuentran aún desaparecidas.
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¡Los milagros en Filipinas!
El martes por la noche, el pueblo de Masara (en Filipinas) viviría una de las tragedias más grandes que ha tenido. Un deslizamiento le ha quitado la vida a una decena de personas, otras tantas desaparecidas y con diversas historias para contar sobre este hecho.
Sin embargo, dentro de toda la incertidumbre que ha surgido, una niña logró sobrevivir ante el deslizamiento que enterró a una terminal de autobuses para empleados de una mina de oro y 55 casas cercanas. Rocas, lodo y árboles se deslizaron más de 700 metros por una empinada ladera cerca de la empresa Apex Mining Co.
Cruz Roja filipina, a través de su cuenta de Facebook, ha comenzado a realizar campañas de donación de sangre, situación que se encontraba estancada o prohibida, debido a la situación de covid-19 en el mundo. Han escrito:
«El voluntariado brilló intensamente de nuevo a raíz del deslizamiento de tierra en Maco, Davao de Oro el pasado martes. Un grupo de voluntarios mineros bajo RC 143 en silencio pero rápidamente trabajó ayudando a la comunidad minera afectada. Aplicando los aprendizajes y la formación que obtuvieron del Philippine Red Cross RC 143 que el presidente y CEO Dick Gordon formularon hace años e inculcó en cada voluntario de RC 143 desde entonces, los mineros-voluntarios RC 143 contribuyen significativamente en los esfuerzos de rescate continuos en Barangay Masara en Maco. El grupo comenzó a entrenar bajo RC 143 el año pasado y está programado que realice otro entrenamiento de actualización antes de que el deslizamiento de tierra ocurriera el martes.»
