Cuatro miembros de una familia perdieron la vida al caer desde el piso 21 de un edificio de apartamentos en la capital de Indonesia. Según el reporte preliminar, la familia decidió suicidarse.
El jefe de policía de Penjaringan, Agus Ady Wijaya, informó que la familia ingresó al estacionamiento del edificio en su vehículo a las 4:02 p. m. y se dirigieron al vestíbulo principal. Posteriormente, utilizaron el ascensor para acceder al piso 21 y subieron al techo, donde ocurrió la fatal caída a las 4:21 p. m.
Unas imágenes de seguridad captaron momentos íntimos de la familia dentro del ascensor, donde el padre mostró afecto a su esposa e hijos antes de que todos dejaran sus teléfonos móviles en una bolsa. Por lo que las autoridades alegan que se trata de una situación de planificación.
«A partir de estos gestos, llegamos a la conclusión de que la familia decidió quitarse la vida en colectivo y todo había sido planeado de antemano», dijo Agus a los medios locales.
«Aún no podemos determinar el motivo que llevó a estos familiares a tomar tan trágica decisión», expresó el jefe de policía, añadiendo que todavía están investigando la escena, reuniendo pruebas y testimonios.
Agus detalló también que, al examinar los cuerpos en el sitio del suceso, el padre y la hija tenían las manos atadas con una cuerda. De igual modo, la madre estaba atada a su hijo.
Caso similar de una familia encontrados muertos en la India
El 1 de julio de 2018, 11 integrantes de una familia fueron encontrados muertos colgados del techo, con los ojos vendados, las manos atadas y la boca tapada. Sin embargo, una mujer mayor, se encontraba en un rincón de la habitación y había sido estrangulada.
Según los primeros reportes de las autoridades, se trataba de un asesinato, pero según avanzó la investigación, la policía encontró varios diarios en la casa, escritos en tercera persona y a lo largo de 11 años. En ellos, se leían instrucciones detalladas sobre cómo cada miembro de la familia debía ir por la vida.
Sin embargo, también contenían las instrucciones sobre las muertes de cada uno de los familiares, bajo un ritual llamado “Árbol de Banyan”.
Las autoridades concluyeron que los escritos pertenecían a Lalit Chundawat quien quedó muy afectado tras la muerte de su padre, Bhopal, en 2006. Afirmaba que estaba poseído por el alma del patriarca de la familia, quien le daba las instrucciones que plasmó en los diarios.
Sin embargo, las investigaciones parecen indicar que la familia no pensaba que iba a morir; Lalit había asegurado que el difunto Bhopal los salvaría.
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