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jueves, 19 septiembre, 2024

“La Casa de Navidad” en Apastepeque, una verdadera atracción

Para muchos, las decoraciones en torno a la navidad son una verdadera atracción, y “la Casa de Navidad” en Apastepeque es una de ellas.

En esta época miles de salvadoreños se encargan de decorar y llevar el espíritu navideño a sus hogares con la colocación del tradicional nacimiento del niño Dios que recuerda el episodio bíblico del paso de Jesús en la tierra con su nacimiento.

Así mismo, la colocación de árbol de navidad y las luces de diferentes colores son elementos especiales que resaltan en esta época de diciembre. Relacionado a este tema una espectacular “Casa de Navidad» se encuentra en municipio de Apastepeque departamento de San Vicente.

Vídeo/TCS

¿Por qué es reconocida la Casa de Navidad?

Este maravilloso lugar cuenta con una variedad de más de 4 mil piezas que conforman la villa navideña de Blanca Ramos una salvadoreña que muestra con su creatividad al público su impresionante creación relacionada a la época de navidad.

Sus piezas miden aproximadamente un centímetro hasta y metro y todas están colocadas según la creatividad y representación que Blanca ha decidido crear en su “Casa de Navidad”.

Esta pasión no solo la comparte ella misma, sino que, también permite que su familia se involucre y recree la magia de la navidad.

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En esta misma casa Blanca explica que la mitad de su sala contiene el asombroso nacimiento que también guarda un sello de identidad del arte de Apastepeque.

En este espacio no solo se presenta el nacimiento del niño Dios, sino que se muestran otros episodios de la biblia como la Anunciación de del ángel a la Virgen María, la Visita de la Virgen a su prima Santa Isabel entre otro.

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Historia

El origen de los nacimientos se remonta a la época de 1182 con San Francisco de Asís quien se encargó de instalar el primer nacimiento viviente para ejemplificar el nacimiento de Jesús.

Datos históricos mencionan que la tradición del árbol navideño se remonta al siglo VIII en Alemania, cuando Bonifacio taló un roble dedicado a Thor en la región de Hesse y, tras leer el Evangelio, ofreció un abeto, un árbol de paz que representaba la vida eterna, adornándolo con manzanas y velas esta tradición se fue expandiendo a más países.

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