Una misteriosa roca, ubicada en el caserío El Chirrión, cantón El Palón, del distrito de Lolotique, municipio de San Miguel Oeste, se encuentra la famosa piedra de una culebra. Su nombre se debe a que en ella se puede observar la figura del reptil plasmada en el centro de la enorme peña.
Ante ello, el periodista de Noticias 4 Visión, Alex Rivas, se aventuró por conocer el misterio de esta piedra. De acuerdo con datos brindados por el guía turístico de la zona, Boris Guevara, puntualizó que esta plasmación fue hecha por la tribu de los Lencas antes de la llegada de los conquistadores españoles.
Video/TCS. Reportaje elaborado por Alex Rivas
Los petrograbados son dibujos ejecutados por percusión en las piedras, con o sin uso de pigmentos. Por lo general, están ubicados en el lugar de origen donde fueron confeccionados. Algunos son de gran tamaño, mientras que otros fueron hechos en piedras más pequeñas y, por ende, transportables. Esto es conocido como arte rupestre.
En este mismo sentido, el petrograbado en Lolotique representa (para la comunidad) una forma de poder conectarse con sus antepasados y que, con el pasar de los años, continúan preservando esta piedra como una forma sagrada y cultural.
Además, Guevara subrayó que la serpiente o Coatl en Nahuatl es un animal imprescindible que está lleno de simbolismo y usos mágicos.
Video/TCS
En el distrito de San José Guayabal, municipio de Cuscatlán, también se encuentran varios escritos en piedras que fueron hechos por un asentamiento indígena.
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Acá en TCS Ahora, también le hemos presentado el relato de muchas personas que aseguran que hace años existió una gran serpiente debajo de la joya arquitectónica de la iglesia Santa Cruz de Roma.
Los habitantes de la localidad cuentan que esta serpiente tiene también una historia que le ha acompañado desde hace mucho tiempo. Según cuentan, hace muchísimo tiempo, este animal habitaba en una vertiente de agua donde se encuentra ahora un enorme árbol de Ceiba.
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