Gabriel de Azevedo recibió su primera convocatoria con Selección Nacional durante la pasada Fecha FIFA. Luego de no sumar minutos en los partidos frente a Bonaire y Monserrat, el mediocampista del Palmeiras sub-20 confesó que tiene «muchas ganas» de vestir la Azul y Blanco.
«No veo la hora de volver a El Salvador y debutar […] El profe me dijo que tenía que tener un periodo de adaptación y que voy a tener mi momento en la cancha. Tenía ganas de debutar, pero será en el tiempo de Dios», comentó «Gabi» en el programa El Salvador FC.
De igual manera, el mediocampista ofensivo confesó que tiene contacto con David Dóniga y espera regresar a sus convocatorias.
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De Azevedo proyecta un futuro prometedor manteniendo el proyecto.
«Lo hablé con mis compañeros. La afición está descontenta con la Selecta. El profe Dóniga llegó hace un año y nosotros tenemos una buena base. Aquí en Brasil los entrenadores se cambian en cada momento […] Tenemos que dar tiempo al tiempo. Dóniga es un gran profesional. Sé que este 2025 será un año maravilloso«, comentó.
Sobre los abucheos en el «Cuscatlán, «Gabi» recalcó «que ni para el hincha ni el jugador es fácil», pero necesitan estar unidos para enfrentar los retos venideros.
Amor por Águila en las venas
«Gabi» confesó su sentimiento aguilucho, heredado por su padre Fábio Pereira de Azevedo, exjugador de la institución migueleña. Además, agradeció el gesto que tuvieron con él durante la concentración.
«Recibí un homenaje por la carrera de mi papá en Águila. Haré un cuadro con esa camiseta», dijo.
Y agregó: «Soy hincha de Águila. Estoy triste porque quedó eliminado en este torneo. Pero me alegra por ‘Rafa´’ Tejada, es mi compañero de la Selecta».
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