Un hombre, identificado como Lashawn Thompson, de 35 años, murió dentro de una sucia celda de la cárcel en Georgia, Estados Unidos, después de ser “comido vivo” por insectos y chinches. Estuvo recluido en ella durante tres meses. El personal de la cárcel notó que se estaba deteriorando.
La familia de Thompson exige una investigación criminal que permita esclarecer las circunstancias del deceso. El hecho ocurrió a mediados del pasado septiembre, tres meses después de que fuera arrestado por un delito menor de agresión. Según miembros del personal de seguridad, su celda estaba tan sucia, que debían entrar vestidos con un traje diseñado para protegerse de materiales peligrosos.
El hombre se encontraba recluido en una unidad psiquiátrica por supuestos problemas de salud mental, pero según la familia, él estaba físicamente sano.
Hasta el momento, el informe forense no determina la causa del fallecimiento. Sin embargo, los documentos de la cárcel describieron una infestación grave en relación con parásitos e insectos en todo su cuerpo. Además, se reveló que el rostro y extremidades presentaban cortes y lesiones autoinferidas al rascarse la piel.
Denuncia de la familia del hombre
El abogado de la familia difundió los informes de la prisión. Así como las imágenes de la celda y del estado en que fue encontrado el cuerpo. “Lo dejaron allí para que muriera y fue devorado vivo por insectos y chinches«, expresó uno de los familiares.
Por su parte, la oficina del alguacil del condado de Fulton anunció que se han destinado $500,000 para abordar la infestación de:
- Chinches
- Piojos
- Otras alimañas dentro de la cárcel
En diferentes partes del mundo hay celdas que son individuales, pero en muchas de estas se encuentran cinco personas alojadas, o mejor dicho incrustado. Además, en algunas, no tienen espacio ni para estirar las piernas, ni de descansar. En su mayoría, las celdas son muy pequeños y no tienen ni ventilación ni agua.
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