La chaya es un arbusto nativo de Tabasco y la península de Yucatán, México. A menudo, sus hojas tiernas son cocinadas y preparadas en recetas, como si se tratara de espinacas. Poseen un sabor muy particular, y además están llenas de nutrientes.
Tanto en México, como en El Salvador, esta planta se prepara de diferentes maneras. En el país, en el municipio de San Marcos, elaboran pupusas con chaya.
Video/TCS. Reportaje elaborado por Damaris Gómez.
Esta planta lleva el nombre científico de Cnidoscolus aconitifolius, y también es llamada «el árbol espinaca», por su similitud con este alimento.
Las hojas se cocinan y transforman en ricas recetas, las cuales poseen muchos nutrientes que ayudan al organismo. Sin embargo, deben tener una cocción a la perfección, pues si se ingieren crudas, pueden ser tóxicas para la salud.
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El Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada (CESTA), lleva a cabo un proyecto hacia 15 comunidades de la zona sur. Con el objetivo de realizar huertos caseros de chaya. Así lo explica Laura Mejía, coordinadora del programa Cero Basura.
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¿Qué beneficios tiene comer chaya?
Parte de los beneficios de la chaya, es su alto contenido en:
- Vitaminas
- Sales minerales
- Oligoelementos
- Enzimas.
Otro punto importante es que posee mucha fibra, que ayuda al sistema digestivo y evita el estreñimiento. También, es rica en hierro, calcio, potasio, vitaminas A y C. Además de compuestos carotenoides, magnesio, sodio, cobre y zinc, esenciales para las funciones cerebrales y el crecimiento.
Sus propiedades nutricionales son superiores a las de la espinaca, amaranto, col o lechuga. Incluso, para diabéticos, puede ayudar con la disminución de los niveles de glucosa en sangre, y la regulación de la presión arterial alta.
La chaya es tan versátil que se puede ingerir en distintas bebidas típicas. También es posible prepararlo en platillos, como parte del relleno de tamales, o incluso para que sea la envoltura de estos.
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