La sal de mesa o sal común es un condimento milenario, compuesto por sodio y cloro (cloruro de sodio-NaCl). La sal es una sustancia esencial para la salud, pero puede ser dañina si se consume en forma excesiva o insuficiente.
El consumo en abundancia de sodio está relacionado con una mayor incidencia de hipertensión, que a su vez aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y daños renales.
Video/TCS. Reportaje elaborado por Damaris Gómez.
La reducción de la sal en la dieta es una de las medidas recomendadas por la reciente Cumbre de las Naciones Unidas en prevenir las enfermedades no transmisibles y señalada como una de las estrategias para mejorar la salud de la población, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La OMS puntualiza que, el exceso de sal en la dieta, causa el 10% de las enfermedades en todo el mundo. Además, detallan que las comidas preparadas tienen muchas veces un contenido oculto de sal, ya que no hay información acerca de la cantidad que contienen. Así lo explica el nutricionista, Jorge Henríquez.
Video/TCS
¿Existe una cantidad de consumo?
El consumo habitual de sal en exceso puede parecer inofensivo, pero se asocia a diversos riesgos para la salud que causan, cada año, millones de muertes prematuras.
La OMS recomienda comer menos de 5 gramos de sal o 2,300 miligramos de sodio al día. Una cucharadita llena contiene 2.3 gramos, es decir, 6 gramos de sal.
Video/TCS
¿Existe la sal saludable?
Debido al creciente conocimiento de los problemas de la sal en la salud de las personas, han surgido algunas alternativas en el mercado. Sin embargo, no todos los tipos de sal etiquetados como saludables lo son.
Además, de nada sirve utilizar menos sodio en los alimentos si varios de sus componentes ya vienen listos del mercado. Por ejemplo, no es una estrategia muy eficaz poner un poco de sal en el agua que va a cocinar su pasta, si la salsa de tomate contiene sodio.
Te podría interesar: ¿Alguna vez ha degustado pupusas de chaya?
