Luego del terremoto registrado ayer lunes en Indonesia, específicamente en la provincia de Java Occidental, la Agencia Nacional para la Gestión de Desastres (BNPB) ha verificado 268 muertes, 1.083 heridos y 151 personas siguen desparecidas por el terremoto registrado cerca de la localidad de Cianjur.
Las autoridades indicaron que la mayoría de las víctimas del sismo telúrico de magnitud 5,6, ocurrido a 75 kilómetros de Yakarta, murieron aplastadas por el colapso de los edificios. Entre las víctimas que han reportado la mayoría son niños que, se encontraban en la escuela cuando el fenómeno natural golpeo la zona.
Reportes indican que el terremoto situó su epicentro a 10 kilómetros de profundidad, sacudiendo la Provincia Occidental la cual, es la más poblada de esa nación con casi 50 millones de habitantes. La tensión continúa entre sus habitantes ya que los informes de la Agencia Nacional para la Gestión de Desastres de Indonesia revelan que este martes 22 de noviembre, se han registrado más de 118 réplicas con magnitudes entre 1.5 y 4.2.
Los equipos de primeros auxilios trabajan contra el reloj para tratar de rescatar con vida a personas que resultaron soterradas en las viviendas. Frente a este panorama tan devastador, Indonesia reporta cuantiosos daños materiales en cuanto a su infraestructura: 22,000 viviendas han sido destruidas y más de 58,000 personas se han visto desplazadas.
Para atender a las personas también se han improvisado hospitales, los doctores tratan a los pacientes en el exterior en lugares que han sido improvisados después del terremoto, que se sintió en la capital Yakarta.
El presidente de Indonesia, Joko Widodo, también ha visitado las zonas afectadas.
Los sismos son frecuentes en el país asiático, que se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica en la que cada año se registran unos 7.000 terremotos, la mayoría de ellos moderados.
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