Con golpes, pedradas y patadas recibieron el ministro de Seguridad, Sergio Berni, tras su llegada a calmar los ánimos de los conductores de autobuses, enfurecidos por el fallecimiento de uno de sus compañeros, durante la madrugada de este día.
A pesar de que contaba con seguridad a su alrededor, el altercado sucedió mientras buscaba platicar con las personas que se manifestaban. Fue recibido con insultos y piedras, que alcanzaron a impactarlo.
CANAL NUEVE – TELENUEVE / AFP.
Las protestas surgieron debido a la inseguridad que se ha generado en la zona de Matanza, en la periferia oeste de Buenos Aires.
En las primeras versiones, el ministro recibió golpes en la cabeza, lo que provocó que cayera al suelo, permitiéndole a los manifestantes patearle sin consideración. Además, la seguridad no pudo controlar a los álgidos conductores.
Con un casco de bicicleta y el rostro ensangrentado, el funcionario salió del lugar, para ser trasladado a un centro asistencial. Según los médicos que le atendieron, presentó un cuadro de fractura de cráneo y del malar. Uno de sus ojos resultó afectado, provocando un hundimiento ocular.
Antecedentes de la agresión al ministro
Daniel Barrientos, de 65 años, era conductor de un medio de transporte colectivo en Argentina. Falleció de un disparo, luego de que dos asaltantes subieran a la unidad y lo agredieran.
Después de conocerse la noticia, realizaron un paro de transporte. Las autoridades mencionaron que hacen lo que está a su alcance, en el intento de prevenir este tipo de actos.
La provincia de Buenos Aires es la más poblada de Argentina. Ahí viven 17.5 millones de habitantes, de los 45 que tiene todo el país, según el último censo. En la ciudad donde ocurrió la tragedia, Matanza, residen 1.8 millones de personas.
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