Los bomberos continúan su lucha por extinguir los voraces incendios que han arrasado barrios enteros en los suburbios de Los Ángeles. Los vientos han dado tregua, pero no se descarta que recobren fuerzas.
Los incendios han destrozado más de 10,000 edificaciones. Además, han quemado hasta ahora más de 14,000 hectáreas y las autoridades ya reportan al menos 13 fallecidos.
“Creo que es una combinación de 50/50: ya sabes, el gobierno podría haber hecho un mejor trabajo. Tal vez también haya tenido la culpa, la naturaleza, el cambio climático. Hay demasiados dedos para señalar en este momento que no tengo tiempo, ¿sabes? Más aún, pensando en dónde voy a vivir. Porque incluso si nuestro edificio sigue en pie, no hay nada cerca, la calidad del aire es terrible”, manifiesta Jennifer Aguilera una de las residentes afectadas en Altadena.
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El presidente estadounidense, Joe Biden dijo el viernes que hay «evidencia clara de saqueos» en medio del caos generado por el fuego.
“Lo que me recordó fue una escena de guerra en la que había ciertos objetivos que eran bombardeados y la artillería los hacía estallar sin motivo alguno. En otras palabras, había un fuego que se volvía loco y quemaba todo, y tres casas estaban bien”, externó el presidente Biden.
Para enfrentar los saqueos, el mandatario demócrata afirmó que el gobierno está brindando seguridad al área con apoyo de militares y de la Guardia Nacional. Se declaró además un toque de queda nocturno.
Fuente: Gilles CLARENNE, Cecilia SANCHEZ / AFPTV / DC POOL / AFP
Incendios forestales dejan cuantiosas pérdidas:
Se estima que las pérdidas pueden ser de hasta 150,000 millones de dólares, según AccuWeather.
El mayor de los incendios arrasó más de 8,000 hectáreas del exclusivo barrio de Pacific Palisades y en vecindarios de Malibú, donde los bomberos dijeron que empiezan a controlar el fuego.
El incendio en el área de Altadena, solo estaba controlado en un 3%, con más de 5,000 hectáreas quemadas y amenazas en la infraestructura clave, incluidas las torres de comunicación en Mount Wilson.
Un tercer fuego que estalló el jueves por la tarde cerca de Calabasas y el enclave de Hidden Hills, donde residen celebridades como Kim Kardashian, estaba bajo control en un 35%.
En medio de una sequía, la Agencia Federal de Gestión de Emergencias advirtió que la tregua de los vientos no durará y se espera que aumenten su intensidad de nuevo en los próximos días.
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