Bolivia inició un despliegue militar en las distintas estaciones de gasolina y diésel a nivel nacional. Esta medida busca combatir el contrabando de esos combustibles que son importados y vendidos a precios con subsidio.
El gobierno de Bolivia desplegó alrededor de 880 soldados en 120 puntos de distribución, así lo indicó el viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Pedro Vargas, junto a funcionarios de la estatal Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH).
Video/TCS.
En ese país se contabilizan alrededor de unas 700 gasolineras y en ellas se busca “establecer controles de diferentes estaciones de servicio”. El dispositivo se ha aplicado en áreas urbanas y en las fronteras en la ciudad de Tarija, que limita con Argentina.
De acuerdo con el Viceministerio de Hidrocarburos, el país suramericano consume por día unos 7 millones de litros de diésel y unos 6 millones de gasolina. De los cuales, importa un 70% de ese primer carburante y un 50% del segundo.
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