La presentadora salvadoreña, Luciana Sandoval, abrió su corazón en el programa Detrás de los Reflectores, donde compartió anécdotas, reflexiones y emociones que la muestran tal como es: humana, transparente y llena de luz.
En Viva La Mañana, el debate entre jocotes y marañones terminó en una experiencia nostálgica: los presentadores se atrevieron a comer algo que los llevó de regreso a su infancia.