Las autoridades chinas intentaron este lunes 28 de noviembre contener un movimiento de protesta de un alcance histórico, en el que la población reclamó el fin de las restricciones sanitarias por el Covid-19.
La censura china trabaja intensamente para suprimir cualquier información sobre las protestas que estallaron el fin de semana en varias ciudades, en demanda de libertades políticas y el fin de los confinamientos del coronavirus.
En las redes sociales ya no quedaban noticias sobre las manifestaciones. En la plataforma Weibo, una red social china similar a Twitter, las búsquedas de “Río Liangma” y “Calle Urumqi”, lugares de las protestas en Pekín y Shanghái, fueron desligadas de cualquier referencia a las protestas.
Protestas
Dos personas fueron detenidas en un sitio de Shanghái, y medios locales consultaron por el motivo del arresto, un policía dijo que fue “porque no obedeció nuestras disposiciones”, y los agentes también ordenaron a las personas borrar las fotos de la manifestación de sus teléfonos móviles.
Las manifestaciones también reclamaron más libertad política, con algunas personas que pidieron la renuncia del presidente chino, Xi Jinping, recién nombrado para un histórico tercer mandato.
En la capital Pekín y en Shanghái se dieron grandes congregaciones, incluidos choques con la policía que intentó impedirles llegar a la calle Wulumqi de Shanghái, cuyo nombre es la palabra Urumqi en mandarín.
En la noche del sábado 26 de noviembre, algunos grupos coreaban “¡Xi Jinping, renuncia! ¡PCC (Partido Comunista Chino) renuncia!”. En Pekín, al menos 400 personas se reunieron a orillas de un río durante varias horas, algunas de las cuales gritaban “¡Todos somos de Xinjiang! ¡Vamos pueblo chino!”.
El domingo también se dieron protestas en Wuhan, la ciudad central, donde primero se detectó el Covid-19 y se reportaron manifestaciones en Cantón, Chengdú y Hong Kong.
Cero Covid-19
Las protestas han sido motivadas por la frustración con la política gubernamental de cero covid, que incluye confinamientos, extensas cuarentenas y campañas masivas de pruebas para erradicar hasta el mínimo foco de contagio.
“La gente llegó a un punto de ebullición porque no hay una dirección clara para terminar con la política de cero covid”, comentó Wu Muluan, experto en política china en la Universidad Nacional de Singapur.
El estricto control informativo chino y las restricciones de viaje ligadas a la política dificultan verificar cuántas personas se manifestaron a lo largo del inmenso país
China reportó 40.052 mil contagios de Covid-19, un récord en el país de 1.400 millones de habitantes.
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