Si bien toma su nombre del pasaje de la Biblia en el que Abel es asesinado por su hermano mayor a causa de los celos, este término denomina un complejo de personalidad que afecta a los niños. El psicólogo Charles Baudouin estudió el comportamiento celoso que sufren algunos primogénitos.
Video/TCS. Reportaje elaborado por Damaris Gómez.
Aunque no implica una agresión de muerte como lo describe la historia bíblica, sí puede llegar a considerarse un comportamiento severo y agresivo en contra del hermano menor. Los niños no tienen control sobre sus emociones y les cuesta trabajo canalizarlas.
Para un primogénito, la llegada de un hermanito representa un cambio en su estructura familiar, la dinámica con sus padres y su lugar como hijo.
Esto supone compartir habitación, perder ciertos privilegios, estar menos tiempo con sus padres, nuevos roles, ya no ser el único centro de atención, y más tareas.
Video/TCS
Síntomas del complejo de Caín:
El complejo de Caín no supone un peligro de muerte, pero sí representa un comportamiento agresivo contra el menor cuando los padres no están presentes. Según los expertos, este síndrome es más salvaje que el complejo del príncipe destronado, pues el niño busca deshacerse de su hermano menor.
Una pronta atención y apoyo emocional puede evitar que dañe o agreda al otro. Algunos síntomas del complejo de Caín son los siguientes:
- Agresiones (físicas, emocionales, o verbales)
- Resentimiento
- Regresión (orina en la cama, o trata de llamar la atención de los padres con comportamientos que ya había superado)
- Fijaciones (comportamiento infantil que no corresponde a su edad)
- Quejas
- Malestar físico
- Llanto recurrente o sensibilidad
- Negarse a hacer las tareas que le corresponden
- No querer dormir solo
- Lenguaje infantil
- Agresividad
- Indiferencia con el hermano menor
Video/TCS
Te podría interesar: ¿Qué es el síndrome de Prader Willi?