Tras el fin de la tregua entre Israel y Hamás, el ejército israelí continúa avanzando en el sur de la Franja de Gaza. Esta tercera fase, que ocurre luego de constantes bombardeos y la incursión terrestre en el norte, podría ser mucho más lenta y sangrienta, pues en el área se refugia alrededor del 75% de la población desplazada.
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Mientras que, los desplazados se encuentran en una condición complicada, ya que se están en una zona asediada y no pueden trasladarse hacia Egipto, la otra zona limítrofe con Gaza.
“Juro, que no sé hacia dónde me dirijo, solo quiero acercarme a la frontera para que cuando el muro sea destruido pueda ser el primero en salir de aquí. O simplemente llévennos a la tumba y terminen con esto”, dijo Hamdi Zaheer.
Por su parte, el portavoz israelí, Ofir Gendelman, reveló que existen dos condiciones innegociables para que la guerra termine.
“La primera, Hamás debe liberar a todos los secuestrados, sin excepción. Segunda, los líderes de Hamás deben entregarse y esa organización terrorista debe ser desmantelada por completo y para siempre”.
Organizaciones siguen pidiendo un cese al fuego en Gaza
Mientras todo esto ocurre, organizaciones humanitarias siguen exigiendo un alto al fuego inmediato en Gaza. Una de ellas es Médicos Sin Fronteras (MSF), quienes, desde diferentes ciudades del mundo, se manifestaron de forma pacífica en contra del conflicto.
El director ejecutivo de Médicos Sin Fronteras en Líbano, Ahmed Al Dakhiri, enfatizó que “los ataques a hospitales y equipos médicos deben cesar de inmediato. También deben terminar el bloqueo y las medidas restrictivas israelíes sobre la ayuda”.
Por otro lado, Katrien Claeys, jefa de equipo de MSF en la zona central de Gaza, reveló que en las últimas 48 horas han llegado a urgencias del hospital Al-Aqsa más de 100 muertos y más de 400 heridos. Algunos de los pacientes fueron llevados al quirófano de inmediato.
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