El Salvador no es ajeno al impacto provocado por el cambio climático. Las alteraciones en los patrones climáticos, como lluvias irregulares, sequías y olas de calor intensas, generan desafíos para el riego y la producción de cultivos básicos como el maíz, el frijol y el café.
Esteban Morales, quien por años se ha dedicado a cultivar la tierra, describió los cambios que ha percibido. “Sí nos ha afectado, y en este tiempo no deja de afectarnos. Los cambios en el pH del agua, las olas de calor y las altas temperaturas nos obligan a incrementar los riegos durante el día”.
Además, las altas temperaturas y lluvias fuera de la temporada correspondiente complican la situación en los cultivos. “Nos afectan porque, cuando llegan las lluvias en un momento inusual, se incrementan los hongos y las bacterias en los cultivos”, señala Morales.
Ante ese panorama, los agricultores han adoptado sus estrategias para enfrentar la reducción del agua disponible y el aumento de las temperaturas. Por lo tanto, Jonathan Alemán, agrónomo especialista sugirió métodos de riego más eficientes para optimizar el uso del agua.
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“Existen varios métodos, como el riego por goteo, que aprovecha la cantidad de agua que la planta necesita. También se pueden considerar sistemas de nebulización o riego por aspersión”, explicó Alemán.
El cambio climático también afecta a quienes se dedican a la recolección de hortalizas, una de ellas es Alicia Vásquez quien asegura que “cuando hay demasiada lluvia, el chile se arruina, se pudre y eso reduce la producción”.
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