Las banderas blancas se alzaron en la pista del Mónaco GP; y es que en el túnel había un auto lento, el cual pudo haber ocasionado un accidente muy grave de que se efectuara, por la velocidad y lo poco visible del tramo.
Sin embargo, en esa ocasión Hadjar logró evadir con mucha precisión y en la última oportunidad al auto de Miyata, quien se había quedado con un avance muy lento en dicha competición de la Fórmula 2.
El auto de Hadjar pasó muy cerca del de Miyata, pero se resalta de gran manera la destreza que tuvo Hadyar, que no permitió que una tragedia se hubiera dado en Mónaco, que por la velocidad y el ángulo pudo resultar muy trágico.
Pero esto sirvió para ubicar con mayor precisión el auto de Miyata, y ayudarlo a que saliera del lugar donde podría ocasionar una tragedia por lo lento que se conducía en ese tramo, y que volviera a la conducción competitiva lo más rápido posible.
Te podría interesar: El relevo de Xavi para dirigir al Barcelona
