Un reciente informe del Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos de la Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA) revela que más de 100 niñas menores de 19 años fueron víctimas de abuso sexual solo en el primer trimestre de 2024.
Los sentimientos de culpa y vergüenza son algunos de los efectos que experimentan las víctimas de abuso, explica la psicóloga Idalia Cabezas. Además, pueden manifestar pesadillas, aislamiento y dificultad para confiar en otras personas.
«El impacto social es significativo, ya que las menores pueden desarrollar miedo a interactuar con otros y experimentar una sensación de inseguridad constante», explica la especialista.
Esta situación subraya la urgencia de reforzar mecanismos de protección infantil, según ORMUSA. Su coordinadora, Mayra Bolaños, destaca que la prevención debe abordarse desde la educación integral en las primeras etapas de la vida.
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Estadísticas de abuso sexual en niñas y adolescentes
El Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos de ORMUSA, con información del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU), revela que en los primeros seis meses de 2023, 149 niñas menores de 19 años fueron víctimas de violencia sexual.
De estos casos, 25 fueron cometidos por padrastros, 16 por padres y la misma cantidad por tíos, mientras que, en 10 hechos, los agresores fueron primos de las víctimas.
El informe también destaca que niñas de entre 0 y 9 años forman parte de estas estadísticas, lo que evidencia la necesidad de fortalecer las redes de protección infantil y mejorar la respuesta de las instituciones del Estado ante estos casos.
Para ORMUSA, la falta de estadísticas completas sobre el problema impide la generación de estrategias efectivas de prevención.
Video/TCS/reportaje elaborado por: Lissette Santamaria.
La educación y el apoyo familiar es fundamental
Detectar casos a tiempo y garantizar una respuesta efectiva depende de la capacitación de docentes y personal de salud.
Asimismo, las madres desempeñan un papel clave, a través, de la comunicación con sus hijas.
«Es fundamental educar a los niños sobre los límites de su cuerpo, hablar abiertamente sobre estos temas y validar sus testimonios. Si una niña reporta una situación de abuso, se debe actuar de inmediato para que se sienta protegida y respaldada», señala la psicóloga Idalia Cabezas.
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