¿Recuerdas el escalofriante silbido que acompaña a Elle Driver mientras camina por un hospital en Kill Bill Vol. 1? Aunque no puedas escucharlo ahora mismo, seguramente sabes de qué silbido hablamos. Lo que muchos no saben es que esta perturbadora melodía tiene una historia que va mucho más allá de que el director de cine Quentin Tarantino lo utilizara en esta película.
El silbido fue compuesto originalmente para la película británica Twisted Nerve, estrenada en 1968. Detrás de él estaba Bernard Herrmann, una leyenda del cine, también responsable de las inolvidables bandas sonoras de Psycho y Taxi Driver.
Video/TCS/Reportaje Elaborado por: Andrés Cortez
En Twisted Nerve, la melodía servía para acompañar a un personaje con una inquietante doble personalidad. Lo curioso es que, a pesar de su tono aparentemente inocente, el silbido tiene una repetición y cadencia que genera una incomodidad difícil de ignorar. Esa ambigüedad sonora entre lo infantil y lo macabro es lo que lo hace tan efectivo.
Décadas después, Tarantino lo rescató y lo usó para darle vida a uno de los momentos más tensos y memorables de Kill Bill. Desde entonces, esta pieza se ha convertido en un icono del suspenso moderno apareciendo en series, comerciales y hasta en canciones.
Una muestra más de que en el cine a veces un sonido puede trascender el tiempo y los años.