La Fesfut (Federación Salvadoreña de Fútbol), por medio de la Comisión de Regularización, dejó en evidencia «su profunda preocupación» por las delaciones del presidente de la Primera División, Cnel. Samuel Gálvez, que dejó la puerta abierta a una posible intervención gubernamental en la liga.
Este miércoles, en una entrevista con un medio local, Gálvez mencionó que dentro de dos años ve razonable que el Estado salvadoreño intervenga en la competición, dejando la política de lado para enfocarse en el bienestar deportivo, aunque esto suponga un castigo de parte del organismo que rige el fútbol internacional, FIFA.
La postura no fue compartida por la comisión, dejando claro en un comunicado las consecuencias de poner en marcha un plan de este tipo.
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«No solo afectaría a la selección mayor masculina, sino que tendría un impacto devastador en todas nuestras selecciones, incluyendo las selecciones femeninas, fútbol playa y categorías juveniles», menciona la nota.
Y agrega: «Una suspensión por parte de la FIFA impediría la participación de nuestros equipos profesionales en competiciones internacionales, afectando el desarrollo y la visibilidad de nuestros talentos, y evitaría la notable participación de nuestros árbitros internacionales. De esto, nada dice el Presidente de la Primera División».
La Fesfut menciona que mantendrá su labor para evitar sanciones y propone «mayor comunicación, trabajo en equipo y unión entre todos los actores del fútbol nacional».
Por último, la comisión destaca que del fútbol dependen económicamente muchas familias y las sanciones podrían afectar «la economía y calidad de vida» de estos.
Comunicado íntegro de la Fesfut
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