La donación, por parte de FUSAL, tiene un monto que asciende a más de $244,000, con un beneficio para 12 pacientes que padecen de fibrosis quística. La intención principal es que contribuya a mejorar su salud y la calidad de vida.
Alejandro Poma, vicepresidente de FUSAL, mencionó cuál es la importancia de seguir realizando este tipo de donativos, así como mostrar las bonitas experiencias que se han tenido gracias a la recuperación de pacientes en diversas áreas.
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Agregó que se encuentran satisfechos de encontrarse en una posición en la cual pueden ayudar a las personas que sufren de la enfermedad, y ver la evolución en su salud.
Mauricio Romero, presidente de la Fundación de pacientes con fibrosis quística, comentó acerca de lo privilegiado que se siente el poder contribuir al país, y sobre todo a las personas que lo padecen, para aliviar y sobrellevar la enfermedad.
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¿Qué es la fibrosis quística?
La fibrosis quística es un trastorno heredado que causa daños graves en los pulmones, el sistema digestivo y otros órganos del cuerpo.
La fibrosis quística afecta a las células que producen moco, sudor y jugos digestivos. Estos líquidos secretados son normalmente ligeros y resbaladizos.
Aunque la fibrosis quística es progresiva y requiere cuidados médicos diarios, las personas con fibrosis quística suelen ser capaces de estudiar y trabajar. Las mejoras en los exámenes de detección y los tratamientos significan que las personas ahora pueden vivir hasta los 30 o 40 años, y algunos viven hasta los 50 años.
La mucosidad espesa y pegajosa asociada con la fibrosis quística obstruye los conductos que transportan el aire hacia el interior y el exterior de los pulmones. Esto puede causar signos y síntomas como los siguientes:
- Tos persistente que produce moco espeso (esputo)
- Sibilancia
- Intolerancia al ejercicio
- Infecciones pulmonares recurrentes
- Fosas nasales inflamadas o congestión nasal
- Sinusitis recurrente
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