Un juez federal anuló la política de “parole in place” del gobierno de Joe Biden, dejando en un limbo legal a cientos de miles de indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses.
La decisión fue tomada el día de ayer, por el juez de distrito J. Campbell Barker, designado por el expresidente Donald Trump, quien concluyó que la administración de Biden había excedido su autoridad.
Esta política, implementada a principios de este año, otorgaba estatus legal temporal. También, permisos de trabajo a cónyuges y ciertos hijastros de ciudadanos estadounidenses, protegiéndolos de la deportación.
Desde su inicio, “parole in place” fue recibida con críticas por parte de 15 estados encabezados por Texas, que presentaron una demanda para detener la medida. A continuación le mostramos un breve resumen de este programa.
Video/TCS
Los inmigrantes indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses pueden solicitar la legalización de su situación, pero normalmente tienen que salir primero del país, arriesgándose a una separación que puede durar años o incluso ser permanente.
De acuerdo con defensores de los derechos humanos, eso implicaba que muchos indocumentados prefiriesen no arriesgarse a tratar de regularizar su situación y terminar separados de sus familias.
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La posible apelación de Biden sobre el «parole in place»
Luego de la anulación presentada por el juez federal, la próxima instancias que le queda a la administración es apelar el fallo el próximo jueves mediante el Departamento de Justicia.
No obstante, es muy probable que el programa no subsista a la administración del próximo presidente, que ya adelantó que buscará proceder con la deportación masiva más grande de la historia, quitando también el Estatus de Protección Temporal (TPS) a los inmigrantes que lo poseen.
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