En los últimos años, para nadie es sorpresa oír hablar de un fenómeno llamado parálisis del sueño, pues muchas personas, a lo largo y ancho del mundo, han atestiguado vivir la experiencia en medio del descanso. Y bastantes relatos pueden constituir, fácilmente, un tomo completo de cuentos de terror.
Uno de los casos más curiosos del asunto, es que casi solo colecciona narraciones de esa clase, pues muy poca gente, si no nadie, ha afirmado vivir una experiencia placentera cuando se hace presente, en lo profundo del sueño.
Pero, antes de cualquier cosa, debemos definir lo que es una parálisis del sueño, y en realidad, no es un fenómeno complejo, ya que solo consiste en despertarse en medio del descanso, y no poder mover ninguna parte del cuerpo.
Excepto los ojos, que pueden desplazar la vista hacia el entorno, y los párpados, que permiten cerrarlos.
Así lo define Medline Plus, el portal de salud especializado del gobierno de Estados Unidos:
«La parálisis del sueño es una afección, en la cual usted no puede moverse ni hablar cuando apenas se queda dormido, o al despertar. Durante un episodio de parálisis del sueño, usted tiene consciencia, en su totalidad, de lo que está pasando«.
Así lo describe la ONG Trastorno Límite de la Personalidad, de México:
No te puedes hablar ni mover, literalmente, el cuerpo se vuelve prisionero de su propia mente.
Los relatos son diversos, pero los hay de dos clases: los que, al despertarse, pueden ver a su alrededor, y la imagen es un calco exacto del sitio donde se durmieron, y los que ven a su entorno, pero además experimentan alucinaciones: objetos, voces e imágenes, fabricadas por su propio cerebro.
Por regla general, este momento no es de gozo para ninguno, pues muchos de los que lo viven, sufren ansiedad y angustia. Algunos relatos apuntan a entes no humanos, sombras, seres de otro planeta, etc.
Otros, incluso, narran haber visto a familiares cercanos cargando un arma, y luego abalanzándose sobre ellos. En este momento, en la mayoría de casos, como en cualquier otro sueño, se despiertan de forma súbita.
Fase REM
Para entender cómo funciona la afección, hay que recordar que existen cinco fases del sueño: 1, 2, 3, 4 y la última, la célebre etapa REM (por sus siglas: rapid eye movement), que es la más profunda, y que ocurre alrededor de 70 y 90 minutos después de haberse dormido.
La fase REM es una de las más importantes, pues en ella se consolidan los recuerdos. El portal explica que, durante este periodo, los ojos se mueven de forma rápida (de ahí su nombre), y es común tener sueños vívidos, en los que se está inmerso por completo, y que parecen reales.
Asimismo, el cuerpo se relaja, y los músculos no se mueven. Entonces, la parálisis ocurre en la transición de la fase REM al despertar, o sea, al final de esa etapa. El cerebro se despierta, pero el cuerpo continúa en modo REM, por lo que sigue paralizando por completo. Por ello, es imposible moverse.
Muchas personas relatan las imágenes que ven en el desesperante momento:
En la mayoría de ocasiones, suele durar entre varios segundos y dos minutos. No se puede estimar una duración específica, pues es un fenómeno aún misterioso de la mente humana.
Causas
El mismo portal explica que no se han determinado las causas exactas de la parálisis del sueño, pero que ciertos factores podrían relacionarse al fenómeno:
- No dormir suficiente
- No tener un horario regular para descansar (como los que trabajan por turnos)
- Estrés
- Dormir boca arriba.
Asimismo, ilustran que algunos problemas médicos podrían relacionarse con la afección:
- Trastornos del sueño, como la narcolepsia
- Padecimientos mentales, como trastorno bipolar, por estrés postraumático, y de pánico
- Uso de ciertos medicamentos, como para tratar el trastorno por déficit de atención e hiperactividad
- Uso de sustancias.
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