Tras cinco días en Portugal, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, viajó este día, a Madrid, como parte de su primera gira europea en la legislatura.
La prensa señala que, en su agenda, el mandatario tiene programado participar en un foro empresarial, antes de reunirse con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y con el Rey Felipe VI.
Video/AURELIA MOUSSLY / AFPTV / CAMARA DE COMERCIO DE ESPANA / AFP.
Reacciones en el viaje
La visita del líder brasileño a Portugal culminó con una ceremonia en el Parlamento luso, la cual se vio empañada por manifestaciones convocadas por el partido de extrema derecha Chega. Lula resumió esta acción como un «papelón” de la ultraderecha.
Esa protesta fue una de las dos manifestaciones que se llevó a cabo en los alrededores de la Asamblea. Tanto las manifestaciones en contra de Lula como la otra a su favor trascendieron sin incidentes, indican los medios.
En el mes de mayo, Chega recibirá al expresidente brasileño, Jair Bolsonaro, en Portugal en un evento de ultraderecha y había anticipado esta protesta, que coincide con la ceremonia del 25 de abril.
La agenda de Lula
Lula incidió en dos temas de la agenda internacional que están relacionaos con la guerra de Ucrania y el tratado entre la Unión Europea y el Mercosur.
Sobre la guerra de Ucrania, Lula reiteró su apuesta por un diálogo de paz porque:
«La guerra no puede seguir indefinidamente (..). Es necesario hablar de paz», externó. El presidente defiende también crear una mesa con países «que den confianza” a ambas partes. Esta postura contrasta con la mantenida por la EU y fue resumida también por el presidente de la Asamblea lusa, Augusto Santos Silva: «Rusia debe cesar hostilidades y retirarse de un país soberano».
Un asunto de plena sintonía, que mantiene Lisboa y Brasilia, es sobre el impulso al acuerdo UE-Mercosur. Lula se lleva de Portugal el compromiso del primer ministro, António Costa, de trabajar como «punta de lanza» para acelerar el tratado en Bruselas.
Este tema planteará, Lula, en la agenda que se estrenará en España, país que en julio asumirá la dirección en turno de la UE. Es por eso, que el mandatario eligió Portugal y España en su primera visita a Europa, ya que son conocidos por sus históricos lazos y son la «puerta de entrada» a la UE.
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