El secretario de Estado de EE. UU. Marco Rubio acusó al presidente colombiano, Gustavo Petro, de actuar de manera “irresponsable” al cancelar vuelos con deportados mientras estos ya estaban en el aire. Según Rubio, estos vuelos habían sido previamente autorizados, lo que generó una controversia sobre el manejo de los acuerdos migratorios entre ambas naciones.
Marco Rubio expresó su descontento de manera contundente, subrayando que bajo la administración de Donald Trump, Estados Unidos no tolerará este tipo de situaciones. “Estados Unidos no será tomado por sorpresa ni tolerará abusos”, expresó. Además, reafirmó el compromiso del país norteamericano con la lucha contra la inmigración ilegal y la protección de la seguridad fronteriza.
Por su parte, el gobierno colombiano no ha emitido una respuesta oficial sobre las declaraciones de Rubio.
Esto ocurre en un momento en que las relaciones bilaterales entre ambos países enfrentan desafíos, entre las que se incluyen el manejo del narcotráfico, el cambio climático y la cooperación en temas de seguridad.
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Mientras tanto, Karoline Leavitt, asistente del mandatario estadounidense y secretaria de Prensa de la Casa Blanca, destacó que: “El presidente Trump no anda con rodeos cuando se trata de proteger la patria de Estados Unidos”.
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