La ONG Caminando Fronteras indicó que, al cierre del año, al menos 10,457 migrantes murieron o desaparecieron en este 2024, tratando de llegar a España. Esta información es el peor balance desde que se comenzó a publicar en el año 2007.
En su investigación indica que 131 embarcaciones desaparecieron con todos sus pasajeros, “sin que nunca se volviera a saber de ellos”. Con estos datos se indica que es un 58% superior al registrado el año pasado, e incluye a 1,538 niños y 421 mujeres.
Los datos abarcan el periodo del 1 de enero y el 5 de diciembre de 2024, lo cual refleja una media de 30 muertes al día, frente a las 18 de 2023, añade el comunicado.
Esta información se levanta a partir de las llamadas de auxilio de los propios migrantes, del relato de las familias de los migrantes fallecidos o desaparecidos y de las estadísticas oficiales de salvamento.
De acuerdo con las autoridades, esta situación se da por el uso de las precarias embarcaciones. Las rutas cada vez más peligrosas y al empleo de medios insuficientes por parte de los servicios de rescate en el mar.
Video/TCS.
Rutas peligrosas para llegar a España
La inmensa mayoría de estas víctimas, 9,757, se produjeron en la ruta que lleva del noroeste de África a las islas Canarias y que pasa por el océano Atlántico, entre fuertes corrientes.
El pasado 23 de diciembre, Salvamento Marítimo auxilió a 22 ocupantes de una embarcación precaria, dice su post publicado en X.
Otras 517 muertes tuvieron lugar en la ruta que parte de Argelia y llega a la costa este de España. Las víctimas eran de al menos 28 países, africanos en su mayoría, pero también de Irak y Pakistán.
El número de inmigrantes llegados ilegalmente a España entre el 1 de enero y el 15 de diciembre de 2024 ascendió a 60,216, un 14.5 % más que en el mismo periodo del año anterior, según datos del Ministerio del Interior español.
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