Decenas de miles de personas manifestaron en Madrid para denunciar el proyecto de amnistía acordado por Pedro Sánchez con el separatismo catalán. Que permitió esta semana la investidura del socialista para un nuevo mandato como presidente del gobierno.
Según la administración española, se congregaron en la plaza Cibeles, en pleno centro de la capital, entre una marea de banderas españolas y europeas, en respuesta a una convocatoria apoyada por la oposición conservadora.
Los participantes corearon gritos como «Sánchez traidor», «Sánchez a prisión» y «Cataluña es España».
Sánchez, que perdió las elecciones legislativas del 23 de julio frente al conservador Partido Popular (PP) de Alberto Núñez Feijóo, consiguió el pasado jueves ser investido en el Congreso como presidente del gobierno tras obtener el apoyo de la extrema izquierda y los partidos nacionalistas e independentistas de Cataluña y País Vasco.
Para lograr este apoyo, Sánchez aceptó una serie de concesiones, entre ellas:
Un proyecto de amnistía para los dirigentes y militantes separatistas encausados por su implicación en el fracasado intento de secesión de Cataluña en 2017.
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