El Papa Francisco obsequió al rey británico Carlos III dos fragmentos de la cruz en la que Jesús fue crucificado con motivo de su coronación. La ceremonia se realizará en próximo 6 de mayo.
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Las piezas se conservaban en la sala Lipsanoteca de los Museos Vaticanos. Ahora formarán parte de la Cruz de Gales, que encabezará la procesión de ceremonia en la que serán consagrados Carlos y Camila como monarcas británicos.
El obsequio se trata de dos pequeños fragmentos, uno de 1 cm y otro de 5 mm, en forma de cruz y engarzados en el crucifijo de plata más grande detrás de una gema de cristal rosa. Además, la Cruz de Gales tiene escritas palabras extraídas del último sermón que fue pronunciado por San David en el idioma galés, traducido dice: “Sé alegre. Mantén la fe. Haz pequeñas cosas”.
Después de la coronación, la cruz será recibida oficialmente por la Iglesia de Gales en un servicio religioso y será compartida entre las Iglesias anglicana y católica de la región.
La Cruz fue encargada por el Rey Carlos III, cuando aún era príncipe de Gales, cuando se realizó la celebración por el centenario de la Iglesia galesa en 2020.
Bendición de la cruz
En un servicio religioso celebrado en Llandudno, el arzobispo de Gales, Andrew John, bendijo la nueva Cruz de Gales ante dignatarios y feligreses.
«La cruz habla de nuestra fe cristiana, nuestro patrimonio, nuestros recursos y nuestro compromiso con la sostenibilidad», afirmó el arzobispo.
«Estamos encantados también de que su primer uso sea guiar a sus majestades (Carlos y Camila) a la Abadía de Westminster en el servicio de coronación», agregó.
¿Cuándo fue fabricada?
La reliquia fue diseñada y fabricada por Michael Lloyd, en consulta con la Colección Real. Está hecha de lingotes de plata reciclada, suministrados por la fábrica Royal Mint, en Llantrisant, de madera y pizarra.
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