«El beso con Jenni fue espontáneo, mutuo, eufórico y consentido. No hay deseo ni posición de dominio», mencionó Luis Rubiales.
«Los medios rinden pleitesía al falso feminismo, una gran lacra de este país», dijo Luis. El dirigente de la Federación ha reiterado su mensaje de perdón por unos hechos desafortunados, aunque ha reiterado que el beso a Jenni «fue espontáneo, mutuo, eufórico y consentido».
«Un pico consentido no es para sacarme de aquí«. «¿Ustedes creen que lo que hice es para esta cacería? ¿Es tan grave para que me vaya habiendo hecho la mejor gestión para el fútbol español? No voy a dimitir. No voy a dimitir, no voy a dimitir, no voy a dimitir», ha gritado de forma reiterada.
Rubiales ha decidido contar su «verdad» sobre lo ocurrido sobre el césped al ganar el Mundial en Sídney. El dirigente ha asegurado que en el pasillo de campeonas para recoger las medallas, cuando llegó Jenni a su posición, fue ella inicialmente la que le levantó y que al bajarlo al suelo «Jenni y yo nos abrazamos y yo le dije. ¿Un piquito? Y ella me dijo: vale».
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