En México, al menos 6 agentes perdieron la vida y otras 12 personas han resultado heridas en la explosión de un vehículo. En él se encontraban miembros de la Policía y la Fiscalía de Jalisco en la ciudad mexicana de Tlajomulco de Zúñiga.
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Ante el hecho, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, tildó el ataque como cobarde. «Se trata de un hecho sin precedentes que pone de manifiesto de lo que son capaces estos grupos de delincuencia organizada», comunicó en su cuenta de Twitter.
«El gabinete de Seguridad de Jalisco está en sesión permanente. Desde la Fiscalía seguiremos informando conforme las investigaciones avancen y los datos oficiales sean confirmados», agregó.
Además, Alfaro informó que la agresión se produjo cuando una comisión de policías y fiscales se encontraban verificando las pistas sobre una fosa clandestina que se había reportado en una llamada anónima.
El fiscal de Jalisco, Joaquín Méndez, también dijo este miércoles que, de acuerdo con la información preliminar que manejan, la “decisión” de detonar los artefactos explosivos “fue calculada”.
En Jalisco se han registrado 1,095 homicidios y al menos 750 personas se encuentran desaparecidas entre enero y junio de este año, según cifras oficiales. La secretaría de Defensa, también ha reportado atentados con estos artefactos en Guanajuato y Jalisco (oeste).
Aparecen cuerpos desmembrados en México
El pasado 26 de junio, los cuerpos de siete personas aparecieron desmembrados frente a la iglesia del barrio de San Mateo de Chilpancingo, capital del sureño estado mexicano de Guerrero.
Según las investigaciones policiales, todos pertenecían a la misma familia, que había sido dada como desaparecida desde el pasado 9 de junio.
Cuando los agentes llegaron descubrieron que el resto de cuerpos permanecían en el interior, y otras extremidades esparcidas por el pavimento. Por lo que las autoridades cerraron la calle, para llevar a cabo las investigaciones y el levantamiento de cadáveres.
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