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En Chile, el desierto de Atacama, ubicado en el norte del país, ha sorprendido este año con una inesperada explosión de color, con flores blancas y púrpuras.
De acuerdo con medios locales, el fenómeno que transforma el desierto en un manto florido ocurre cada cierto tiempo cuando coinciden los niveles adecuados de lluvia y temperatura. Las semillas latentes en la arena despiertan y florecen, llenando el paisaje de vida y color. Aparentemente, esto no había ocurrido desde el año 2015 en el país, lo que ha dejado impresionado a muchos locales e internautas.
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Además, mencionan que este fenómeno atrae a turistas y científicos, por igual, ansiosos por presenciar y estudiar este raro evento. En medio de uno de los lugares más secos del planeta, la vida florece y poder apreciar su capacidad para adaptarse y renacer.
¿Qué se sabe del desierto de Atacama?
Cuando ocurre el desierto florido en su máximo esplendor, más de 200 especies vegetales florecen. Ahora, la principal protagonista ha sido la «pata de guanaco», una flor morada que apenas requiere agua y prefiere los sitios arenosos.
Los científicos aún no han determinado si este fenómeno, registrado también en el invierno de 2015, presuntamente tiene relación directa con el cambio climático o no, o con los fenómenos de El Niño o La Niña.
